Esterilizar a tu mascota es un acto de salud y amor por su vida.
La esterilización en los animales es un procedimiento que interviene el
aparato reproductor del animal. En las hembras consiste en remover los ovarios
y útero, y en los machos este consiste en remover los testículos. Tal como en
los humanos cuando se realiza este procedimiento en los animales se inhabilita
la reproducción, es decir, la fecundación de crías no deseadas.
En los perros y en los gatos, tanto hembras como machos, se ha
comprobado que la esterilización trae beneficios que van más allá de evitar la
sobrepoblación, sino que impactan de manera favorable en la preservación de la
salud de la mascota y en la prevención de futuras enfermedades. Además, genera
cambios positivos en su comportamiento.
Diferentes estudios han demostrado que entre los beneficios de la
esterilización esta disminuye la posibilidad de que se desarrolle cáncer de
mama, previene el cáncer cérvico uterino y el cáncer de ovario, así como el
riesgo de otras infecciones uterinas en las hembras. En los machos evita
tumores testiculares y reduce el riesgo de cáncer de próstata y otras
infecciones. Adicionalmente, disminuye la posibilidad de que aparezcan tumores
y hernias alrededor de las nalgas, que se dan habitualmente en animales de
avanzada edad que no han sido esterilizados, también puede reducir los impulsos
agresivos, lo que disminuye la probabilidad de que tu mascota se haga daño
peleando con otros animales, así mismo, evita que tu mascota se escape lejos de
casa en busca de pareja. Puede mejorar comportamientos indeseables como la
marcación excesiva de territorio o que intente montar a objetos o personas e
incluso facilita el proceso de educación de tu mascota.
Después de la cirugía es muy
importante seguir al pie de la letra las indicaciones del veterinario y tener
cuidados como el uso del collar isabelino, lo cual evitara que tu mascota se
lama o arranque los puntos de la cirugía y que estos se infecten, evitar el
ejercicio brusco, limpiar y desinfectar la herida en casa, tener una
alimentación ligera durante las 24 horas siguientes a la esterilización y
asistir a los controles veterinarios post operatorios. Todo lo anterior, debe
ser complementado con las recomendaciones adicionales que te dé tu veterinario
de acuerdo al caso. Estos cuidados favorecerán la cicatrización optima y la
recuperación exitosa de tu mascota tras el procedimiento.
Por ultimo, debes tener en cuenta
que tu mascota se puede tardar en recuperarse de la anestesia entre 24 a 36
horas después del procedimiento; sin embargo, debes estar pendiente de
reacciones extrañas del anestésico que no hayan sido señaladas por tu
veterinario, así como también, debes respetar el periodo de cicatrización de la
herida el cual normalmente dura entre 10 a 15 días pero varia según el animal.
Ahora surge un gran interrogante y
es ¿Cuándo o a qué edad debemos esterilizar a nuestra mascota? Pues bien, los
veterinarios recomiendan que se realice antes de que la mascota alcance su
madurez sexual; en los felinos esto se da entre los cuatro y seis meses de edad
mientras que en los caninos esto se da entre los 6 o 7 meses de edad, aunque
puede variar según la raza, por eso se recomienda hacerlo antes de ese tiempo.
Culturalmente existen muchos mitos
alrededor de la esterilización de los animales, por esto vamos a referirnos y
aclarar tres de los más comunes. El primero de ellos es que los animales que se
esterilizan engordan, ante esto se ha comprobado que la esterilización no
predispone la obesidad en los animales, siempre y cuando se mantenga la
alimentación adecuada y la actividad física en la mascota. El segundo mito es
que se vuelven de mal carácter, en realidad tu mascota no se volverá más
agresiva, por el contrario, la esterilización ayuda a contralar la agresividad
y la irritabilidad de tu mascota sobre todo en los machos. El tercer mito es
que las hembras deben dar por lo menos una cría, en cuanto a esto los estudios
han mostrado que cuando la operación se realiza antes del primer celo las
posibilidades de tener un cáncer de mama son menores. En cambio, si se realiza
después del primer celo las posibilidades se incrementan. Además, desde la
etología que es la rama de la que estudia el comportamiento de los animales, no
se ha encontrado evidencia de que si las hembras no tienen cría generen
frustraciones emocionales, como suele suceder en algunos casos con los humanos.
En cruz mascotas nos interesa que
estés bien informado, sobre todo en lo que tiene que ver con el cuidado de la
salud de tu amigo peludo; por esto también te contamos cuáles son los riesgos
que pueden presentarse en el proceso de esterilización de tu mascota. En este
sentido, se han documentado que los principales riesgos se asocian al proceso
de sedación y de recuperación sobre los cuales tiene una gran influencia la
edad de tu mascota, a mayor edad mayores cuidados se requiere antes, durante y
después del procedimiento. También influye su estado de salud, sensibilidad a
los medicamentos y anestésicos utilizados, la habilidad del médico veterinario
e instalaciones para realizar el procedimiento adecuadamente.
Por lo anterior, es preciso que conozcas qué debes tener en cuenta antes y después de la esterilización para disminuir los riesgos y tener un procedimiento efectivo. Lo primero es que antes de la esterilización debes preparar a tu mascota, debe contar con 8 horas de ayuno, no debe estar enferma, ni con vomito ni diarrea, no debe estar tomando medicamentos, debe contar con exámenes pre-quirúrgicos sobre todo si es mayor de 7 años, si es hembra no debe estar en celo, ni lactando o gestante, debe contar con sus vacunas y estar desparasitado y no haber recibido vacunas en los últimos 15 días antes de la esterilización.
Comentarios
Publicar un comentario